jarabe para la tos

tengo que confesar que después de todo, éste fue uno de los mejores años que he tenido. fue un año que tuvo de todo en su dosis justa y de la manera precisa. fue un año de desiciones (sí, esas que me cargan porque soy - precisamente - indecisa), y me alegro de hacer un conteo a fin de año para darme cuenta de que fueron bien elegidas en su mayoría. fue un año en el que sobraron las risas, y eso es bueno, bastante bueno. fue un año en el que conocí gente importante que ayudó a que el año fuera más interesante aún. fue un año en el que la música en vivo estuvo bastante presente, y eso me encanta.

me carga hacer un recuento de lo que hice/pasó éste año, porque mientras me acuerdo me baja la nostalgia y odio que eso me pase, aunque así bien a la rápida diría que fueron muchas cosas buenas y memorables y que espero que no se me olviden, pero que se queden en éste año nomás, donde pertenecen :) y aunque fueron bakanes que no se repitan, que pasen nuevas cosas buenas el año que se acerca y que sean novedosas, como lo fueron las de éste año.

quería poner una foto, pero no encontré una que resumiera todo lo que fue éste año (volvemos a lo de la indesición).

y lo escribo hoy, porque mañana desapareceré.
shao 2007, de verdad te amé.

Etiquetas: fin de año

si hay algo que, sin desesperarme, me gusta mucho, son las manecillas del reloj. me encanta como suenan cada vez que se mueven, me encanta verlas moverse tan rítmica y calmadamente, me encanta cerrar los ojos y escuchar cada tic tac y fijarme que cada cierto tiempo suenan más fuerte o más profundo, no sé, de distinta manera. me gusta mucho y me relaja, pero aún así no aprendo todavía a mirar la hora en ésa clase de relojes, así que si es por eso prefiero los digitales.

shao.

Etiquetas: estupidez, reloj, tiempo